martes, 30 de mayo de 2023

BLACKWOOD. LA MALDICIÓN DE UN CORAZÓN OSCURO / M. M. ONDICOL.

 


SINOPSIS:
“…ahora podría centrarme en el que era y debía ser mi único y verdadero objetivo, volver a casa.”Un accidente pondrá a prueba todo lo que una joven universitaria cree saber de sí misma: sus valores, su orgullo y hasta su propia percepción de la realidad; llegando a límites que jamás hubiera imaginado. Su camino se cruzará con el de Blackwood, el hombre cuyos ecos del pasado le recuerdan cada noche que su tiempo se agota, luchar o resignarse. Luchar, siempre luchar, hasta las últimas consecuencias y a cualquier precio. Hasta dónde estarías dispuesto a llegar para seguir vivo




Hola, holaaaaaa.

Uysss no me puedo creer que esté otra vez por aquí, por estos lares literarios, a los que verdaderamente, tenía completamente abandonado, y ¿Por qué no decirlo? Algo olvidado.

El motivo para querer volver ha sido, como no podía ser de otra manera, un libro.

Más bien, un novelón, y os preguntareis si ha sido el único libro bueno que he leído en tanto tiempo como llevo desaparecida del mapa…pues no, he leído libros buenísimos.

Entonces ¿Por qué este es especial? Seguro que os lo estáis preguntando.

Pues, resulta que el último libro que leí de esta temática me tuvo en un sin vivir hasta la recta final, recuerdo que pensaba “Ostras, con lo abierto que esta todo y las pocas páginas que quedan” y así, así, hasta que de repente la historia empieza a volar, empieza todo a desenvolverse con una rapidez increíble, y cuando lo terminé me quedé que si llego a tener a la escritora delante me la meriendo.

Así es que vi la portada por Instagram, me llamó la atención, leí la sinopsis, me hizo tilín, y en cuanto pude me lo compré en digital y lo leí.

Me sabe mal decir que en dos días y medio, y porque tuve un día de fiesta de por medio que salimos de tardeo, que si no…

Me sabe mal por qué sé, o puedo imaginar más bien, el duro trabajo que lleva el escribir un libro así.

Y es que no es solo un libro de piratas, es que la escritora añade; un viaje en el tiempo, datos y personajes históricos nada desdeñables como Blas de Lezo, un tesoro perdido, magia, brujas, amor, y mucha aventura.



La trama es envolvente, apasionante y adictiva. Escrita de forma amena, su lectura es fresca y fluida, por lo que no puedes parar de leer porque siempre está sucediendo algo más interesante que lo anterior. Además, es muy cinematográfica, parece que estuvieras viendo una película en cada secuencia, y eso hace que la lectura sea más gratificante, a la vez que frustrante,  una contradicción de sensaciones generadas al ver lo rápido que vas a terminar el libro aun teniendo el número de páginas que tiene.



La verdad es que me ha sorprendido mucho, me lo he pasado en grande, aunque haya momentos tensos que no te hacen ni pizca de gracia, otros que los nervios te hacen pensar en liarte a tortas con alguien (me meto mucho en el papel yo, que queréis que le haga…me vuelvo belicosa, y me veía dado mandobles a diestro y siniestro jajjajaja) pero, lo he disfrutado como una enana por todo ello.


Los personajes también suman, no os creáis que no.

Sus perfiles son atractivos;  no tanto por sus perfecciones, más bien diría por lo contrario, en lo que respecta al capitán, sin embargo, acabas dejándolos de lado en por la fuerza de su carácter, tenacidad, lealtad hacia los suyos, su fuerza e intensidad, su poder de mando, y lo atormentado que vive, y que ni aun así se deja vencer, aunque a veces le seduzca la idea. Un hombre complicado, con un carácter bien definido que no cambia su forma de actuar durante la lectura, algo que se agradece mucho, porque normalmente cuando se enamora el más fiero y cruel de los guerreros en novela romántica, acaban siendo tiernos corderitos listos para ir al matadero.

Mérida, destaca por el carácter indómito, luchador y rebelde que se le despierta en su nueva realidad como inquilina en pleno siglo XXI, que inaugura siendo vendida como esclava, un comienzo nada épico ni poético que volteará gracias a su recién descubierta audacia, temeridad, y también templanza hacia un destino incierto pero, con una única misión en mente: Volver a su época. ¿Qué creéis? ¿Lo logrará? ¿O le desbaratará los planes cierto atractivo, atormentado y audaz capitán?

Los secundarios también aportan mucho, están todos bien perfilados, un buen trabajo de la escritora también con sus personajes, los hay odiosos, pero la mayoría, son adorables, y con un gran papel para la trama.

¿Aún no estáis comprándolo? ¿En serio?

No sé qué más decir, ya sabéis que no me gusta destripar los libros en mis reseñas.

Un consejo, comprarlo en papel, no habrá arrepentimientos, además, la escritora tiene pensado escribir una segunda parte para cerrar círculos y tiempos ciegos que quedan.

A tener en cuenta es, que la portada es preciosa.

Yo me lo pido para mi cumple en papel, seguro.

Por último quiero, desde este jardín, dar mí más que sincera enhorabuena a la escritora M. M. Ondicol; Merche, después de leer este novelón, me sumo irremediablemente a la larga e interminable lista de seguidoras que seguro te vas a labrar si todos tus trabajos son la mitad de buenos que este que nos ocupa. Darte desde aquí aliento, y alas, para que lances el vuelo y sepamos de nuevo de nuestro capitán Blackwood, y de la audaz y leal Mérida, que nos han ganado el corazón y queremos saberlo todo, todito, todo.

Un abrazo y, no os lo penséis tanto, redeu, que vais a pasar las mejores horas de lectura de los últimos meses.





4 comentarios:

  1. Hola Mari Carmen, pues por lo que cuentas merece la pena con creces, ya lo creo que sí. Besos :D

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  2. que hermoso blog tienes te mando un beso

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  3. Que sé donde encontrarte como no me guste el libro :)
    Me alegro mucho volver a leerte por aquí.
    Y es que la cabra tira al monte aunque se aleje del monte.
    Es algo que llevas innato, hacernos saber de tus lecturas y has necesitado una muy buena para dar el paso.
    No te vayas, sigue dándonos estas buenas recomendaciones que aquí seguiremos siempre.
    B7s
    Ah y a ver si voy a ver a Julio, aunque estará aburrido de mi ¡lo persigo!

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