Sinopsis:
«Por y para siempre.» Grace se siente perdida después de que su marido la haya abandonado.Entonces, regresa a su pueblo natal y allí conoce a Jackson, la oveja negra. Entre ellos surge la conexión más poderosa que han sentido hasta ahora.Son corazones heridos que intentan recomponerse juntos. ¿Podrán ayudarse a dejar atrás el pasado?Una historia de amor llena de luces y sombras que te emocionará
«Brittainy Cherry ha vuelto a hacerlo: una historia preciosa y conmovedora.» Romance Rehab
«El punto justo de corazones rotos y pasión. ¡Me encanta que él sea más joven!» Steamy Reads
«Esta novela es imprescindible porque va más allá de la típica historia de amor. Trata sobre familia, amistad, segundas oportunidades y el poder del perdón.» Elena’s Bookblog
«Brittainy consigue que se te pare el corazón en cada página de la novela.» The Bookish Sisters
La opinión de Mari Mari:
Después de
estrenarme con esta autora hace unos meses de forma tan favorable decidí
embarcarme de nuevo en otra de sus obras, después de leer varios comentarios
muy favorables de este libro me decidí por él.
Es una
historia muy bonita, aunque tiene su lado duro también.
Con varios
cliches de los que no podemos desprendernos y que nos suelen gustar mucho,
sobre todo el principal de ellos, chico guapísimo y escultural, malote perdido,
ella, chica buena, obediente, con madre víbora de la muerte…después hay alguno
más, pero este llama poderosamente la atención ¿a que sí? Y es que no nos
podemos resistir a ese gran cliché que nos entra enseguida por los ojos y las
neuronas se nos hacen chicle.
A lo que
iba, me ha gustado porque aun con estos cliches, la historia es diferente, la
edad de los protagonistas no son de 20 ella y 35 él, como nos suelen bombardear
en los libros románticos, donde los protagonistas son de temperamento fuerte y
las nenas acaban de salir del huevo para desestabilizarlos con su bondad e
inocencia…
Aquí tenemos una pareja donde ella le saca cinco años a él, ella acaba de estrenar la treintena, es cierto, es una buena chica, que está en pleno proceso de asimilar que su matrimonio se ha ido a fer la ma (o sea a la mierda, a tomar por saco…lo que os apetezca decir) Al ir a su pueblo natal, en circunstancias un tanto peculiares, su coche será el causante de su primer y desastroso encuentro (me meé de la risa, y es que soy muy retorcida yo, sí) con el mecánico del pueblo, Jackson, que no arrastra lo que se dice un pasado de cuento de hadas, más bien todo lo contrario, y es más borde que las hiervas que salen por los caminos.
Lo que en un
principio empieza rematadamente mal, se irá suavizando poco a poco, cuando él
se vaya dando cuenta que Grace, no es como su madre.
Y es que su
madre es…una mala pécora, sí, ya sé que lo he dicho antes, es para remarcarlo.
El padre de
él no se queda atrás cuando se entera de qué familia es la propietaria del
coche rosa que su hijo tiene en el taller, además no ayuda que sea un alcohólico
y que siempre ande más borracho que una cuba.
Se palpa el
conflicto entre estas dos familias, pero… ¿de dónde vendrá la inquina? Ahhhh,
por esos derroteros yo, no me meto, que si hago spoilers me tiráis la bronca.


Ella, porque
aun desmoronándose saca fuerzas, es valiente, la han educado para comportarse
en todo momento, no perder los papeles nunca, siempre tener buena cara, conversación
etc. por quienes son, además de ser gente de dinero. Pero se da cuenta que no tiene por qué soportar
eso, cuando Jackson le hace notar las malas intenciones de quien ella cree que
solo quieren interesarse por ella.
Entonces se dejará así misma perder los papeles, dejará de recibir bofetadas, no se amedrantará por nadie, y empezará a ser quien quiere ser, y se dará cuenta con quien quiere estar.

Aunque
antes, tendrán que librar una carrera de obstáculos que parecerán un tanto
insalvables, pero para algo está el amor ¿no?
Y es que, el
amor te da alaaaaas. Jaajaja
Leerlo, es
un libro bonito, bien escrito, ameno y ligero, además de ser libro único, esta
escritora se ha convertido en un buen recurso del género romántico, porque sus
historias son adictivas, románticas y siempre con gran fondo psicológico sin
que tengas que estar dentro de la cabeza de nadie durante dos, tres o cuatro
libros, que haberlos haylos.
Hasta la próxima,
mi jardín aun huele a verano, aunque en otras zonas del país lo haga a otoño,
incluso a invierno.