Sinopsis:
Una novela coral que nos lleva a través de la vida de tres generaciones para demostrar que no hay edad para el amor, y que cuando las cosas no cambian por nuestra voluntad, algo insospechado puede hacerlas cambiar. Para siempre.
Novela galardonada con el Premio Frei Martín Sarmiento a la mejor novela del 2016.
La opinión de Mari Mari:
Acabo de
terminar este libro, y ufffff, corto, porque es corto, pero intenso como el que
más.
Había leído
buenas críticas de él, así es que decidí darle esa oportunidad que tanto
parecía merecerse, y que contenta he quedado de dársela.
Es una
historia preciosa de un amor clandestino que sale a la luz de la manera más dolorosa,
por medio de la muerte.
Y ya sabéis
que los libros que empiezan con un entierro me suelen encantar, este ha sido
superior en todos los aspectos a todos los leídos hasta ahora.
Es una
historia coral, la de dos familias vecinas, unidas por la amistad, pero distanciadas
por la escala social, pero sobre todo por el ambiente que se vive en cada casa.
Hace que
reflexiones sobre las relaciones, el amor, la traición, el amor propio y hacia
los tuyos, la soga invisible que te aprieta si con una persona déspota a tu
lado no eres solvente económicamente y te dejas dominar, avasallar, humillar, y
acabas siendo la sumisa, la criada del que debería ser tu hogar y se convierte
en un feudo en el que debes servir.
En aquellos
años en que debías aguantar todo lo que te callera encima por los hijos, y
porque te casabas para toda la vida.
Me he dejado
envolver por la magia narrativa que crea alrededor de estas dos familias que irán
desentrañando un secreto, el secreto de una infidelidad, de un amor clandestino
que ha sobrevivido los avatares de una vida que no hubiesen querido.
Mientras,
iremos conviviendo con ellos, entenderemos la gran diferencia que hay de vida
en las dos casas, y el por qué. Una familia, moderna y sin prejuicios, que no
dudan en lo que tienen que hacer cuando la situación así lo requiere.
La otra, con
estrecheces económicas, con un padre de familia que es un opresor, un tirano,
que tiene acobardada a toda la familia, y que solo tiene palabras cariñosas y
amor para con su madre. Me ha dolido Rosa, la mujer, pero creo que me ha dolido
incluso más, Ramón, el hijo mayor, que es el que abre la caja de Pandora, el
que sufre en su carne la tiranía de su progenitor, y el que se va dando cuenta
que así, como viven, no se vive, se sobrevive.
La verdad es que en las últimas páginas te deja tocada y hundida, pero con la sonrisa en los labios, aunque también estés llorando a moco tendido, y con un nudo en la garganta y en el estómago importante.
La narración
es fluida y amena, con un fuerte aire nostálgico, pero a la vez, un duro testimonio
de una época nefasta para las mujeres, un palpable manifiesto a la
independencia económica de la mujer como pasaje para su libertad personal.
En
definitiva, una lectura que merece la pena, que se hace corta, muy corta, con
una historia de amor secreto como subtrama, preciosa y emotiva que te dejara el
corazón estrujadito perdío.
Y una trama
principal en la que te mimetizas para envolverte en el entorno, en las vidas y
circunstancias de sus personajes, y vivir, como un detective más en esta
historia, las pesquisas para lograr descifrar el secreto mejor guardado que
jamás llegaron a imaginar.
Un libro que
es una joya, aun con su pequeño tamaño, y que no os podéis perder por nada del
mundo.