Una gran saga familiar que se enfrenta a la lucha entre lo que el destino ofrece y lo que el corazón anhela.
Las hermanas Elisa y Sabela crecen en una pequeña aldea cercana a Ferrol, donde su madre, Rosalía, una leiteira pobre, las cría sin la ayuda de su marido. Mateo, que emigró a América para iniciar un negocio que nunca concluyó, solo le dejó a su hermano Manuel, sordo de nacimiento, que con su bondad temerosa y sencilla la ayuda a sacar a sus hijas adelante.
Cuando Rosalía comienza a planear la boda de su hija Elisa con Eloy, el único bachiller del pueblo, no cuenta con que Sabela se ha enamorado de él y que el guapo minero Martín tiene otros planes para Elisa.
Tierra sin hombreses una novela de personajes y de intrigas familiares que se enmarca en la Galicia de finales del siglo XIX y principios del XX, en una aldea cargada de supersticiones y de habladurías, lluviosa, pobre; una tierra de viudas de vivos, donde las mujeres ven como sus hombres han de emigrar en busca de una vida mejor, un sueño que a veces se cumple y otras se vuelve contra todos.
La opinión
de Mari Mari.
Conocí a las
hermanas Chacón hace ya varios años a través de la tristemente desaparecida
Dulce, fue su libro “La voz dormida” todo un descubrimiento del cual debo
agradecer la fortuna de haberlo hecho a mi madre, una ávida lectora, quede
verdaderamente hechizada con su forma exquisita de narrar.
Pasado el
tiempo me enteré que tenía una hermana gemela, escritora al igual que ella y me
decidí a conocer también su pluma, quizás presintiendo que no me
defraudaría, lo hice a través de “La
princesa india” y al igual que me paso con su malograda y querida hermana,
quede nuevamente hechizada, y no seré yo una de las que diga cuál de las dos es
mejor que la otra, porque sinceramente, no sabría por cual decantarme ya que
las dos producen en mi las mismas sensaciones.
Son lecturas
con tramas que llevan su ritmo, un ritmo pausado en el discurrir del tiempo, no esperéis que
pase todo en unas semanas, porque todo es como la vida misma, todo llega a su
tiempo sin necesidad de forzar las cosas y los acontecimientos, llegan sin
prisa…pero sin pausa.
Todo ésta
narrado al milímetro, no te puedes perder en ningún momento porque la autora no
te va a dejar que te quedes rezagada, ni que te pierdas ningún pequeño detalle,
y mucho menos un hecho transcendental, te introduces en la vida de un pequeño
pueblo rural donde todos se conocen, donde lo que pasa dentro de una casa lo
saben todos, y si no, creen saberlo…o se lo inventan. Todos los que vivimos en
una pequeña población conocemos el dicho “Cuando el rio suena…agua lleva” pues
en este pueblo el rio es muy caudaloso y siempre está la misma familia
bañándose en él.
¿Nunca os
habéis preguntado de donde salen los chismes? ¿Quién los pone en circulación?
Seguro que si lo supiéramos, muchas veces nos llevaríamos más de una sorpresa, y
luego vendrían las preguntas ¿Por qué lo ha hecho? ¿Qué ganaba o perdía con
ello?
Lo que queda
claro es que nunca llevan a nada bueno, se puede dañar y malograr la vida de
las personas, y hacer infeliz a alguien
no debería hacer feliz a nadie.
Es este
libro, un homenaje a las mujeres valientes que sacaron adelante sus vidas,
junto con las de sus hijos y las
propiedades que dejaban unos esposos que desgraciadamente debían emigrar en
busca de una mejor fortuna que en la mayoría de veces nunca llegaba a
aparecer, a estas mujeres se las conocía
como “viudas de vivos” y nada más esta expresión a mí ya me pone los pelos de
punta.
Esta es pues
una historia familiar, de la lucha de una “viuda de vivo” de muchos años, por
un futuro para sus hijas mejor del que a ella le ha tocado, y antes que ella
también sufrió su madre.
Montará un
futuro para sus hijas, lo luchara, peleara las batallas, perderá algunas,
porque ¿Quién se conforma con lo que eligen para una sin su consentimiento?
¿Qué pasa si tu elegido no es el que te han impuesto?
Pues eso… la
guerra, una lucha de voluntades sin cuartel que llevará a perpetrar toda clase
de estrategias y malas artimañas para ganarla, a costa de cualquier precio.
Al final
haces la reflexión ¿era todo por amor u orgullo de no desviarte del camino
trazado por la voluntad de quien en aquellos tiempos deberían haber obedecido
como buenas hijas?
En esta
trama la escritora se abastece de la cultura y las supersticiones de aquellos
tiempos para crear una fascinante lectura donde el clero tenía mucho que decir
y opinar de lo que pasaba bajo las sabanas de sus feligreses, adoctrinando a
las mujeres en la pasividad e indiferencia en los placeres de la carne que solo
podían satisfacer y sentir los hombres, las mujeres actuaban o debían hacerlo
como simples muñecas hinchables y procrear, que para eso estábamos ni más ni
menos.
La verdad es
que es una lectura muy bien, pero que muy bien ambientada, muy bien hilvanada,
muy bien documentada diría yo en muchos aspectos, con muchos recovecos que no
te esperas, muchos giros inesperados, y picardías de la escritora que te llegan
a ocasionar algún engaño.
En ningún
momento llegas ni a imaginar lo que va a ocurrir a continuación, y eso es algo
digno de agradecer, porque son pocas las lecturas que me sorprenden en los
sucesos que se van desarrollando ya que conforme voy leyendo el libro sé dónde
me lleva a continuación, con este no he podido en ningún momento, aunque los
sucesos se desarrollan a un ritmo pausado la lectura no lo es, porque siempre
se va desarrollando la trama, nunca descansa, ni te deja descansar, solo al final
empieza el ritmo frenético al desenrollarse la madeja y empiezan a aflorar los
secretos, las mentiras, las traiciones, las confabulaciones y las artimañas, y
ves verdaderamente el alcance y la razón de todo, de muchos acontecimientos que no sabes muy bien la razón, aquí, en este momento, se destapan.
Y sufres, y
te deja un sabor amargo, una profunda tristeza, unas ganas de llorar y una
congoja que te deja inconsolable, porque ves como las malas decisiones pueden
llevar a una vida de insatisfacción e infelicidad que nadie debería construir
para nadie, nadie debería ver en la venganza su propia satisfacción y lograr
ganar una guerra inmolándote.
Por último
decir que la prosa de esta mujer es una verdadera delicia, cautivadora y
exquisita para todos los sentidos, ya que todos ellos te los agudiza al máximo,
es de una delicadeza poética abrumadora y maravillosa que hace que tu corazón
palpite con cada frase, cada página te seduce, cada sentimiento lo sientes en
tus carnes. Cargada de frases pasionales, románticas y sensuales, sin caer
nunca en la ordinariez, ya que esta palabra no está en el diccionario de este
ilustre apellido de escritoras, las escenas de amor, pocas (pero haberlas
haylas), son delicadas, cortas, pero decididas, sin pizca de vulgaridad, pero
cargadas de un amor fiero y arrollador, tanto como por otro lado, del amor más
puro, tranquilo, tierno, adorable ¿y porque no? Irremediable e indómito.
Creo que no
hace falta a estas alturas decir que me ha gustado se queda corto, que me ha
encantado también, así es que diré sin ningún género de dudas que me han vuelto
a hechizar, que me ha tenido desde hace tiempo pegándole vueltas a las ganas de
leerlo, pero quería esperar, no sé la razón, pero cuando ha sido la hora lo he
leído, con ansias, con contención, con tristeza, con frustración, con ira,
desesperanza e ilusión, ahora sé que este era su tiempo, que me ha hecho feliz
haberlo leído y que esta escritora me dará muchas más satisfacciones con sus
preciosas y trabajadas historias.
Buenas tardes desde este jardín perfumado del olor aún de este querido libro y su
extraordinaria historia.
Hola, si
habéis llegado hasta aquí supongo que es porque os ha interesado mi opinión del
libro, ya sé que siempre andamos con prisa, pero ya que seguimos aquí tampoco
costaría nada dejarme unas palabras y así animáis el blog ¡¡Y a mí!! ¿Por qué
no reconocerlo? Muchas gracias si lo hacéis, y si no…también.
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