Sinopsis:
Más allá de Lo que el viento se llevó… La leyenda continúa.
Atractivo, rebelde, seductor, indómito. Casi un caballero… Gracias a la maestría narrativa de Donald McCaig entramos en la vida y la época del renegado y fascinante Rhett Butler, que en esta ocasión es protagonista indiscutible. Su infancia en la plantación, la rebeldía que le lleva a ser desheredado por su padre, el inflexible Langston Butler, y luego expulsado de la academia West Point, los orígenes de su relación con Madame Belle Watling, la oposición a la guerra civil y su posterior participación en la misma, y el origen de su fortuna como comerciante en California, son sólo algunos de los episodios que cubre esta novela épica. Y sobrevolándolos a todos, la profunda historia de amor con Katie Scarlett O’Hara, la testaruda, caprichosa, frívola y apasionada mujer cuya vida se verá inextricablemente unida a la suya mucho más allá de lo que ninguno de los dos estaría dispuesto a admitir. Tras doce años de gestación y autorizada por los herederos deMargaret Mitchell, la publicación de Rhett Butler representa un evento cultural internacional. El retrato de uno de los personajes más apasionantes de la historia de la literatura universal renace gracias al talento de McCaig. Esta novela convertirá en realidad los sueños de los miles de lectores marcados de manera indeleble por Lo que el viento se llevó.
La opinión de la Mari Mari:
Debo decir
antes que todo lo que tengo por decir, que nada más ver el libro, en ese mismo
instante, sin la más mínima duda, supe claramente que lo iba a leer…y que me
iba a gustar.
Creo, y
corríjanme si me equivoco, que el personaje que de hecho da nombre al libro es
sobradamente conocido…¿o no tanto?¿que sabemos de él antes de Scarlett O’Hara?
La verdad es que relativamente poco, aunque se pueda intuir que era un tipo
fuera de lo común, la verdad es que se quedaba en mera intuición o suposición.
Tal vez quedo en la película como un cobarde que no quería inmiscuirse en la
guerra de secesión, aunque al final claudicara y se uniera a la causa, pero…
¿era realmente un cobarde o tenía sus principios e ideales? ¿Hasta qué punto
llego a inmiscuirse? ¿Qué hizo en ella?
Os habréis
dado cuenta que nombro la película y no el libro, y es que confieso que el
libro no lo he leído, y la verdad es que no creo que lo haga, la razón…pues
veréis, soy plenamente consciente que si leo el libro me gustara cien mil veces
más que la película, y como es una de mis favoritas no quiero que nada la
desluzca a mis ojos, ni siquiera la obra maestra en la cual está basada.
Pero vayamos
a lo que nos ocupa y no nos vayamos por las ramas.
Rhett
Butler, interpretado en la gran pantalla por Clark Gable, nos deleito a todas
las féminas con su atractivo, apostura, su eterna sonrisa picara de
sinvergüenza redomado, su pose engreído… la verdad es que con lo poco que
supimos de él y ya nos conquisto.
Pues ahora
con el transcurrir de las páginas de su libro y conociendo los hechos que se
narran en esta, su historia, la historia de su familia, amigos y enemigos, la
situación política del país y sus tristes consecuencias, la postura que coge él
frente a ella, y sobre todo su relación con Scarlett, vista por sus ojos…aun
nos enamorara más si cabe.
El escritor
nos introduce en su vida desde su más tierna infancia, conoceremos al niño que
fue y en el hombre que se forjo por todas las vicisitudes, injusticias,
desagravios, vejaciones, soledad..que vio y pasó.
Me encanto
de niño, fiel reflejo del hombre en el que se convierte, creo que el escritor
le encontró el espíritu al personaje, lo que tiene claro desde bien pequeño es
que lo que no quiere ser... que penoso tiene que ser no admirar a tu progenitor,
porque Rhett tiene claro que su padre representa todo lo que el aborrece y no
quiere ser.
Valiente y
admirable, crecerá hasta convertirse en el hombre atractivo, carismático, cínico,
irónico, arrogante, especulador, jugador y mujeriego, no le gusta que le
impongan nada, hace y deshace a su antojo, no le gusta la hipocresía social de
esa época y luchara contra ella haciendo siempre lo que le viene en gana,
repudiado por su padre tiene que sacar el ingenio de bien joven para
sustentarse, se hace así mismo y logra reinventarse una y otra vez hasta
convertirse en un perspicaz especulador hombre de negocios. Sus ideas políticas
harán que sea ignorado por la sociedad y instigado y hostigado, pero aún así no
se amilana. Tiene un encanto natural que hace que nadie se le resista… ¿o sí?
Scarlett
O’Hara, lo menosprecia aunque sienta atracción por él, en su soberbia y
absoluta ignorancia, con una tozudez ciega e insana y victima de su propio ego,
no reconoce lo que realmente siente.
Cuando abre
los ojos y los brazos a lo que tenia preso en su interior ya es terriblemente
tarde, Rhett se ha cansado y le importa todo un bledo.
La niña
caprichosa y consentida, la que todo lo tubo se da cuenta de que lo que ella
creía que era amor por ese hombre que se resistió a sus encantos por años, que
se casó con otra, y que ahora queda libre, no es más que otro de sus caprichos
que al no ser satisfecho se le había clavado
como un puñal, ahora ya, satisfecho su ego porque puede tenerlo, su razón abre
las puertas a lo que tiene que decir su ignorado corazón, qué solo admite un
nombre, Rhett.
Quiero
señalar en este punto que si la tengo delante la estrangulo con mis propias
manos, por egoísta, caprichosa y ciega, por hacer sufrir a Rhett con sus
desplantes, el único hombre que la quiere y admira por ser como es, con todos
sus defectos y virtudes, sabiendo que su amor obsesivo por otro hombre no era
más que un capricho de niña malcriada y siendo consciente de que su amor era
correspondido aunque ella lo ignorara.
Pese a que a
Rhett todo le importe un bledo, Scarlett no está dispuesta a perder al hombre
del que se acaba de descubrir profundamente enamorada, y jugara una última
partida, tendrá que luchar por todo lo que ama y tragarse ¡Por fin! Su infinito
orgullo.
Dentro de la
vida de este gran galán, como no, hay un gran número de secundarios, de los
cuales también conoceremos sus respectivas historias y nos estremeceremos con
algunos relatos y personajes altamente nocivos, porque en toda novela hace
falta un ser malo, ruin, manipulador y vengativo, y aquí no podía ser menos.
Me llamo
poderosamente la atención el cambio radical de uno de los personajes conforme
va pasando por los berenjenales en que se convierte su vida a raíz de la
guerra, como una persona relativamente buena se ciega por los triunfos y el
odio, se convierte en una persona ruin e injusta y en su mirada desesperada ya
desposeída de cordura solo se puede leer el asesinato y la muerte, sin ninguna
otra meta que alcanzar.
La historia
de la hermana también me ha gustado, encogiéndome el corazón porque los dos
hermanos pasen por algo tan similar en el plano afectivo, aunque ella con las
peores consecuencias, se da cuenta de todo cuando es trágicamente tarde, aunque
como el hermano hace resurge de sus cenizas y vuelve aunque sus decisiones no
son para nada acertadas, me gusto cuando por fin recobra la voluntad y la
sensatez y se deshace de la lacra que la destruye.
Me han
gustado todos los personajes secundarios, los que no conocía y los que si,
están detalladamente descritos y los conoceremos en profundidad, para bien y
para mal, y cerraremos todos los frentes abiertos de cada una de las historias.
Los hechos
históricos están muy bien documentados e investigados, narrados de manera
excepcional, haciendo que te metas de
lleno en la guerra de secesión, pasando las mil y una penurias.
Como esto ya
se está haciendo largo voy a terminar hablando de EL FINAL, con mayúsculas,
apoteósico para mí, me quede con la mandíbula desencajada, la boca abierta de
la sorpresa, impensable y por ende totalmente inesperado, no me lo esperaba ni
en un millón de años, y la verdad es que era lo que tocaba, pensándolo
fríamente tenía que ser así, las obsesiones nunca son buenas, pueden destruirte
la vida.
Tara era su
guarida, el lugar donde recuperaba su fortaleza, lo que más amaba, por lo que
siempre había estado dispuesta a todo, hasta que su corazón hablo y se volvió
ingobernable, decidido a ser escuchado, sin su otra mitad, su igual, estaba
incompleta y todo perdía su valor, lo que realmente da valor a la vida es el
amor. Y así Scarlett llego al otro día y jugo sus cartas.
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